He guardado en un baúl todos los recuerdos que tenía,
y después de echar la llave al mar, me encuentro vacía,
pues mi presente es mediocre,
y el futuro que veo en el horizonte
es gris como el alma mía.
Ya no pienso,
ni sueño,
ni vuelo amores.
Ahora me hundo en la tierra sin ilusiones,
ya no encuentro el fuego que caldeaba mis recuerdos
con los que soñaba nuevas emociones.
¡Ay quien tuviera la llave maestra
para encontrar la alegría y olvidar las penas,
ser feliz a cada instante
y tener el amor que me acompañe!. . .
. . .Pero un perdón a mi Dios le pido,
mis días son buenos y no lo olvido.
Estas son meras quimeras que salen de mi corazón,
que no tienen otra cosa… que quejarse sin razón.
Dejar sentires al vuelo en esperanzas de futuro.
ResponderEliminarSiempre digo de no caminar con mochila pesada pero....los buenos recurdos son livianos de llebar en nuestro viaje.
Cariños
Sí, la verdad que los recuerdos son lo único que no pesan, son los pensamientos que atormentan los que pesan un quintal.
ResponderEliminarMuchas gracias abu, por tu lectura y comentario.
Un abrazo.