Fuera de toda imaginación,
No sé el motivo.
Quizás, porque no lo hay
y por ello me falta inspiración.
y por ello me falta inspiración.
El romanticismo que tanto me gustaba
se esfumó
No hay nada que me provoque
un puñado de letras
No hay nada que me provoque
un puñado de letras
para formar con ellas un renglón.
Son insulsas, zafias, sin son,
y aunque las cambie de lugar
no forman un buen renglón.
y aunque las cambie de lugar
no forman un buen renglón.
No tengo nada en mente,
y hace mucho tiempo
que se murieron las mariposas
en mi interior.
Hoy día solo aletean realidades
igual de tediosas
que la voz de mi imaginación.
Se perdieron las palabras,
y no fue esa mi intención.
En la nada absoluta me muevo,
pero si reparo en los paisajes del cielo,
en las pequeñas cosas
que me llaman la atención,
y oigo los pajarillos
que cantan en las ramas desnudas
de un sueño,
donde te acaricio los labios
y oigo los pajarillos
que cantan en las ramas desnudas
de un sueño,
donde te acaricio los labios
entre una brisa liviana de primavera
que me invento.
que me invento.
Pero soy afortunada, porque recordar...
recuerdo.