Qué mañana tan hermosa.
A la luz del sol todo florece,
hasta la vida aunque ella
se encuentre marchita,
florecer parece.
Y es que somos flores
en un inmenso jardín
que se llama vida,
regado por un jardinero
hasta la vida aunque ella
se encuentre marchita,
florecer parece.
Y es que somos flores
en un inmenso jardín
que se llama vida,
regado por un jardinero
que con amor y esmero
enseña los caminos
para que nadie pise
lo que con tanto amor cuida.
Pero en este inmenso jardín
crecen también malas hierbas
con deseos devastadores,
ocupando espacio entre las flores
que mueren atoradas
por sus malignas raíces.
Un jardín que no es perfecto;
crecen también malas hierbas
con deseos devastadores,
ocupando espacio entre las flores
que mueren atoradas
por sus malignas raíces.
Un jardín que no es perfecto;
de ello se encarga el hombre
desde el principio de los tiempos,
pues con desmedida avaricia
va sembrando cizaña
contaminando valles y montañas
destruyendo todo lo que pisa.
Necesita un fuerte insecticida:
¿El desprecio, o el amor?
-"-"-"-"-"
Yo también te perdonaría… si pudieran ir juntos el perdón y el desprecio.
– Benito Pérez Galdós-