Quiero vivir en la total ignorancia de... todo,
en el líquido amniótico del seno materno,
o en el regazo donde se curaban todas las heridas,
resguardada de los males que aquejan el mundo,
donde no quiero salir.
Solo busco las fantasías que me hagan feliz
mientras mis pensamientos los echo a volar,
allí, donde la nebulosa tiene colores diversos
y donde nadie pueda matar mis sueños.
Sueños sedosos y cálidos
que abrigan este corazón
que se enfría de sentimientos.
No quiero salir de la jaula de cristal
que yo misma he modelado
en el horno de mi alma,
donde guardo un lugar para ti
lleno de silencios y esperanzas.
¡Descuélgate de donde estés y ven!,
volaremos juntos aunque solo sea un momento
por los campos de la piel,
y sembraremos en los poros del olvido
azucenas de pasiones blancas.
¡Ven!, solo un momento,
lo suficiente para que te quedes más.