No tengo un verso, ni la mitad.
Anhelante estoy
que pase este largo tiempo
pegado a mi.
¿Serán los años adheridos a la piel
y al corazón?.
¿Mariposas que ya no revolotean en mi interior,
nubes de colores que pintan el cielo
en las puestas de sol y,
no les presto atención?.
¿Será que no sales a buscarme
entre las líneas de los renglones,
para llevarme de la mano
a un cuento sutil y armonioso
pero, con corazón?
A lo lejos un violonchelo
me invita a disfrutar de su melodía.
Su título lo dice todo:
"Yo tengo un sueño"
Cierro los ojos,
y olvido en vez de recordar,
que donde se mire
puede surgir la magia
de una ensoñación, y soñar.
Ni un poema, ni una estrofa,
ni un verso, ni la mitad.
¿Estaré poseída por la realidad,
y todo lo hermoso
quedó oculto tras la luna azul
que vi al borde de un despertar?.
De todas las formas, soy feliz,
y eso es lo que os deseo,
si en un tiempito no vuelvo por aquí.