Cómo me gustaría
que mi capacidad para escribir
fuera como un río infinito
de recorrido suave y colorido.
que mi capacidad para escribir
fuera como un río infinito
de recorrido suave y colorido.
O un campo sin horizonte,
verde como trigal inmaduro
con amapolas perennes,
y poblaciones de abejas
equilibradoras de la vida.
Pero mi exigua capacidad
está en peligro de extinción
como el de estos pequeños seres vivos.
Quisiera que mis letras tuvieran
la armonía de las flores
movidas por un suave viento.
Un soplo de pensamientos
que expresaran las maravillas
de un día feliz y elocuente.
Pero oculta estoy en mi retiro,
y en él, me siento feliz
como ave sinfónica que canta
en un amanecer rosado,
haciendo de mi vida
lo que en este momento
quiero,
mientras veo pasar el tiempo...
tranquilamente.
mientras veo pasar el tiempo...
tranquilamente.
Pero, cómo me gustaría
que mi capacidad para escribir,
fuera grande y salobre como el mar.
fuera grande y salobre como el mar.
Os deseo paséis un buen verano (e invierno a quien corresponda).
Que seáis felices, y los que os vayáis, volváis muy bien.
Abrazos y muchas gracias siempre, por vuestras lecturas.