Mis humildes y sencillas letras, son las hojas de mi otoño tardío cuando comencé a lagrimear tinta sobre pensamientos huérfanos, desgranando amores y fantasías en la soledad de mis horas.



*Hacer versos malos, depara más felicidad que leer los versos más bellos* Hermann Hesse

*Soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabras de lo que digo* Oscar Wilde

LO QUE SE ESCRIBE AQUÍ, NO TIENE PORQUE SER BIOGRÁFICO,
LOS PENSAMIENTOS Y LA IMAGINACIÓN, SON LIBRES COMO EL VIENTO
🍂 SI LA EXPLICAS, LA POESÍA SE VUELVE BANAL, MEJOR QUE CUALQUIER EXPLICACIÓN, ES LA EXPERIENCIA DIRECTA DE LOS SENTIMIENTOS QUE CADA CUAL EXPERIMENTE... Pablo Neruda

28.3.20

Volverá

Mariposas

Por la ventana abierta se introduce la calma,

el silencio impera en el ambiente,
no brilla el sol como cada mañana,
el frío a vuelto a palidecer un cielo gris e inerte.
Llueve con calma gotas que la tierra absorbe con avidez
porque seca está de esperanza
como cualquier día al amanecer.

Pero saldrá el sol,
siempre sale el sol después de la oscuridad
restando días y aumentando perspectivas,
y entonces el viento sonrosado de alegría
bailará entre los retoños de los árboles
que se visten de un verde brillante y esperanzado,
como todos los corazones
que esperan detrás de las paredes
a que cante la primavera con su voz colorida.

Y, "volverán las oscuras golondrinas"
a poblar los cielos de aleteos
para anidar en todos los balcones
abiertos a la sensibilidad de un nuevo abrazo,
y a los paraísos más increíbles, los amores.

Volverá el alba y el ocaso con sus bellos matices,
volverán las flores a los campos,
porque siempre vuelve todo
menos, lo que muere.
Pero mientras,
el brillo de la vida nos envuelve.

22.3.20

Conmigo misma


Ahora si que no sé en el día que estoy, todo pasa silenciosamente, las horas son más largas pero el tic tac del reloj da los mismos pasos.
Con frecuencia abro la ventana para respirar aire puro, seguramente una quimera pues no sé si estará tan puro, aunque nunca se ha visto tan limpia la ciudad de contaminación acústica y ambiental.

Me encuentro lánguida, pero no porque no pueda salir, yo me adapto bien a las circunstancias,
sino porque me he mirado al espejo y eso si que languidece a cualquiera, a cualquiera que tenga encima el carretón de años que en mi se han depositado sin apenas darme cuenta.
Sí sí, ya sé que es MUY SUPERFICIAL esto que digo con la que está cayendo, pero es que el verse joven y un poco atractiva, rejuvenece el ánimo y todo se ve más, más... más mejor como dicen los niños.

Pero mírame, soy feliz porque miro al cielo y aunque está nublado, se pueden ver los colores de la vida que me han regalado.
Los árboles están acunando sus diminutas hojas que dentro de poco crecerán para dar sombra y aliviar el calor que llegará cuando tenga que llegar, como llegará también la expansión por los lugares que hoy, están privados.

La calle esta vacía (como tiene que estar), solo algún carrito de la compra con su dueño, o una barra de pan y un periódico debajo del brazo que dan una nota de vida al ambiente, aunque esa barra de pan es una escusa que algunas personas usan para dar una vuelta, porque perfectamente se puede comprar unas cuantas barras y congelarlas, y así contribuir más fielmente al objetivo marcado; voto por ello, porque yo lo hago. El periódico igualmente, no hace falta, hay saturación de noticias, a no ser que se quiera emplear para otros menesteres...

Me he dado cuenta que la frase de: “las personas mayores, tal y cual”, me está cargando un poco; se oye tantas veces que nunca me había sentido tan añosa ni tan vulnerable, y eso, minimiza.

Todo llega y todo pasa, y esto pasará, seremos un poco más viejas,  ¡pero qué más da!, porque seguramente nos habremos dado cuenta de algo importante... que..............
                           ............

-Oye, esto no tiene nada que ver- Lo sé, pero es para ponerle una 🎵 de humor.

                               

***********


Mi pequeño mundo

En esta isla que es mi habitáculo,
todos los elementos que nutren
yo los atrapo.
Hay sol cuando yo quiero,
luna estrellada y luceros,
hay lluvia y sequía si lo pretendo,
hay un lugar donde mecerme
mientras cierro los ojos y pienso
en los buenos y malos vientos,
los que me besaron la mejilla
y los que me hirieron.
Hay música, risas y llantos,
hay fruta fresca
jardines con claveles blancos
y una flor que por el tiempo
va marchitando.
Pero baila el aire que respiro
de cuando en cuando
con colores que arrebolan 
todo el encanto.
Hay una ventana 
para ver el color que tiene el día,
porque en mi trocito de mundo
prima el color de la armonía.
Es mi isla, es mi habitáculo, 
donde todo está bien
si lo procuro cuando me levanto,
dejando que corra el aire
cuando está viciado.
Mi pequeño mundo
es mi abrigo para el frío,
y mi aire fresco para el calor,
es… mi refugio preferido
donde la soledad no tiene permiso
y donde casi siempre, luce el sol.
🌞

E ele de a




11.3.20

Un pequeño momento

Cierro los ojos en el silencio
y todo está bien.
Los pensamientos están despiertos
en una noche fría sin paisajes,
pues nada veo.
La calle está oscura,
solo las farolas regalan su luz
a la soledad del ambiente.
Las ventanas parecen luciérnagas
que se van apagando en la noche;
solamente los noctámbulos
siguen regalando sus destellos
al camino de la madrugada.

Ni el viento se encuentra en el aire,
duerme entre las ramas desnudas del jardín.
Los semáforos de la calle
cambian sus luces a la ausencia
que pasa indiferente
delante de mi ventana.

Todo está en calma.

Intento despertar el sueño de las fantasías,
pero duerme profundamente
como una estrella apagada.

El silencio dice que me olvide,
pero unas letras desordenadas
revolotean en mi mente
como pájaros confusos
produciéndome insomnio,
y un pequeño momento se alarga
con la mirada puesta en los renglones.
Busco una frase argumental para seguir,
pero no encuentro ninguna
con la que modelar un verso.

Hago caso al silencio de la noche,
y me olvido...

4.3.20

En la ensoñación

Bridal portrait
  
Después de sentir la pereza
que a veces me acuna
cuando la languidez visita mi espacio,
me despabilo respirando el paisaje
que con imaginación hago pasar
por la ventana del ensueño
donde todo es posible,
pues el lienzo habitual delante de mis ojos,
es simple y no merece atención,
solamente si el cielo
se viste de diferentes colores
cuando las nubes reciben la influencia del sol
en complicidad con la naturaleza del viento.

Hoy, ni nubes ni viento,
el cielo se presta de un azul intenso
y los pañuelos de algodón
brillan por su ausencia.
Cerraré entonces los ojos a este color único,
y en complicidad con el sentir del pensamiento,
me sumerjo en el paisaje de unos ojos
que brillan cual luceros en una noche cálida
de brumas azules,
y esperaré esa mirada olivada
y llena de rapsodia que enamora,
cuando sus lagunas se cubren,
de luna llena.