Mis humildes y sencillas letras, son las hojas de mi otoño tardío cuando comencé a lagrimear tinta sobre pensamientos huérfanos, desgranando amores y fantasías en la soledad de mis horas.



*Hacer versos malos, depara más felicidad que leer los versos más bellos* Hermann Hesse

*Soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabras de lo que digo* Oscar Wilde

LO QUE SE ESCRIBE AQUÍ, NO TIENE PORQUE SER BIOGRÁFICO,
LOS PENSAMIENTOS Y LA IMAGINACIÓN, SON LIBRES COMO EL VIENTO
🍂 SI LA EXPLICAS, LA POESÍA SE VUELVE BANAL, MEJOR QUE CUALQUIER EXPLICACIÓN, ES LA EXPERIENCIA DIRECTA DE LOS SENTIMIENTOS QUE CADA CUAL EXPERIMENTE... Pablo Neruda

25.9.18

Volveré a escribirte

Volveré a escribirte
cuando las tardes regresen frías,
cuando el aire cimbreante entre las ramas desnudas,
me recuerden que existes
en algún lugar de la vida.

Volveré a escribirte
en las noches de luna llena,
cuando sus hebras de plata
acaricien la oscuridad,
viajera de sensaciones,

y volveré a decirte
con palabras sobre el papel,
que mi viejo corazón 
sigue latiendo al ritmo de la primavera.
Sí, volveré a escribirte
cuando el buen tiempo desaparezca
y el ambiente se cubra de escarcha,
mientras el calor de mi estancia
rezume serenidad en un letargo nostálgico, 
que me lleve a otros senderos ya pisados...

Volveré a escribirte algún día,
cuando las golondrinas comiencen a emigrar
a otros lugares cálidos
y las palabras se vistan de soledad
en el devenir de unas horas apagadas.

Sí, volveré...
a novelar mis pensamientos
con aires románticos.


19.9.18

Mientras el sol besa las nubes


Se acerca el otoño,
pero hoy percibo aromas de primavera
que me perfuman de esencias.

El sol besa las nubes,
y mientras las viste de plata, se diluyen
como se diluye mi corazón que las contemplan.

Me dejo llevar por la ensoñación de mi pupila,
y desde mi ventana,
alzo el vuelo abarcando la naturaleza.

Planeo el monte de robledales;
al azar anido y, sueño amores.

Cargada de armonía,
espero al jilguero que picotea en mi corazón.
Oigo las notas de su canto pero… no se acerca.
Llora mi sentimiento cuando se aleja,
él tiene otro nido donde le esperan.

Una nube azul escarlata, cierra el sol
y abre mis ojos a la realidad de mi ventana.

Brilla el monte:
serenidad,
nostalgia,
soledad,
silencio,
¡tanto silencio!, 
que oigo los latidos de mis pensamientos.


14.9.18

Visiones respiradas

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El viento sopla aliviando el aire.
En el cielo hay calima
y el sol difuminado por un velo
engaña la calentura que se respira.

Canta la cigarra invisible
minimizando el son de una guitarra
que llora ausencias de un amor lejano.
Se cimbrean los árboles 
como si bailar quisieran 
la tonada de las cuerdas,
mientras el ojo humano 
respira visiones que le serenan.

Calla la cigarra,
algo se acerca, sí,
es el silencio ¡tanto silencio!
que se oye el palpitar de un corazón.
Quizás sea el latido lento del río,
o el de un petirrojo que ha salido del nido
o un trébol que vive en la campiña,
o quizás, sea el mío no reconocido.

El viento sopla aliviando el aire
a la vez que llega la noche.
Los pájaros nocturnos 
salen a picotear las primeras estrellas 
de un firmamento sin luna,
donde la oscuridad seduce el misterio
de unos ojos sin voz
que presiento en la lejanía,
mientras el silencio se respira…

10.9.18

Momentos

Un día cualquiera
en mi jaula de verano…
Árboles por doquier,
tarde tranquila y suave,
un reloj en la pared
que rompe el silencio ensordecedor
con el tic tac,
pulso de los segundos solitarios,
como la respiración sosegada
e interrumpida por algún suspiro
o pajarillo que aletea de rama en rama.
Las hojas brillan con los últimos rayos de sol
y se mecen en un cálido vaivén 
antes de que llegue lo sombrío.

Las abejas y avispas se recogen.
Alguna mariposa todavía danza
con sus frágiles alas
en los trévoles de la pradera,
y los insectos más pequeños
hacen su aparición molesta
cuando ensombrece la tarde.

Refresca, 
el calor del día desaparece por arte de magia,
lo noto en mi estancia
mientras ojeo de vez en cuando
por el ventanal.

Recuerdo, o ya ni recuerdo,
¡hace tanto tiempo!…

Veo la luna que saluda al sol,
y yo, pensando como terminar
este transcurrir.

Solo sé, 
que se acerca la noche mordiendo el día
con sus dientes perlados de estrellas,
y el silencio sobre el silencio
hace eco en las aldeas,
donde las pequeñas luces hogareñas
emularán en la lejanía a las luciérnagas.

Este momento de sensaciones,
se apaga…
y sin pretenderlo, 
comenzarán en la oscuridad los sueños
 de una primavera que ya no existe,
mientras la noche abre los ojos
con sus brillantes pestañeos.