Mis humildes y sencillas letras, son las hojas de mi otoño tardío cuando comencé a lagrimear tinta sobre pensamientos huérfanos, desgranando amores y fantasías en la soledad de mis horas.



*Hacer versos malos, depara más felicidad que leer los versos más bellos* Hermann Hesse

*Soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabras de lo que digo* Oscar Wilde

LO QUE SE ESCRIBE AQUÍ, NO TIENE PORQUE SER BIOGRÁFICO,
LOS PENSAMIENTOS Y LA IMAGINACIÓN, SON LIBRES COMO EL VIENTO
🍂 SI LA EXPLICAS, LA POESÍA SE VUELVE BANAL, MEJOR QUE CUALQUIER EXPLICACIÓN, ES LA EXPERIENCIA DIRECTA DE LOS SENTIMIENTOS QUE CADA CUAL EXPERIMENTE... Pablo Neruda

24.3.25

Cualquier día que susurra la lluvia

 

Llueve en silencio.
El viento sopla en los cristales.
Es un día desapacible 
que invita a observar la vida
y lo que pueda quedar de ella.

La niebla,
al otro lado de la esquina
me trae una voz querida.

Brilla el asfalto húmedo
como negra pista de patinaje.

Todo bien,
soy afortunada.
Algún pellizco en el corazón
por mis ausencias queridas,
y por tantas personas que sufren
la guerra, con sus heridas.
 
Pasan los días, 
regresan los instantes,
y la lluvia sigue silenciosa
como la voz que oigo, sin oír.

Miro el cielo por si sale el sol
en todas las aristas del universo.

Quizás algún día...

¿O será del pensamiento, 
una utopía?


15.3.25

Tuvimos la dicha de conocerte

 

Tuvimos la dicha de conocerte.

Hermoso tiempo que resultó 

efímero y frágil 

como fino cristal

que con un soplo de brisa,

se quiebra en mil pedazos.


Subí a la montaña más alta 

con la imaginación 

a ver si te encontraba

entre las alas del viento

que surcan cerca del cielo,

pero nada vi.


Llevaba un mensaje para ti

que me dejó "mi luna" triste,

y decía así:


Mi cuerpo y tu alma

juntos para siempre,

impresos en un haz de luz

donde el recuerdo permanece,

donde la belleza duerme

y no trasciende en el tiempo.


Tuvimos la dicha de conocerte,

pero te apagaste en plena luz

como el sol cuando llega la noche.



5.3.25

Mirando el mar soñé

El mar de mis pensamientos
es un océano sin horizonte.
Pero está en calma
como el viento que ayer
acunaba las ramas de los árboles,
mientras sus hojas
volaban como mariposas de colores.

En el mar de mis pensamientos
navego como capitana
manejando mi bajel con serenidad,
y alguna pericia que me queda intacta.
 
No me hace falta marinero,
solamente una luz que ilumine mi ruta
hacia el puerto,
pisar tierra firme
donde pueda bailar con los sueños,
mientras descansan los sentires,
los que nos hacen humanos,
grandes, y pequeños.

Mirando el mar
por donde declina el día
me llevaron los sueños,
y no te encontré,
pero me visitaron imágenes, 
aromas, sensaciones, anhelos.
Eran...
recuerdos del ayer
que abrace con alegría,
y se estrechó nuestra distancia
hasta que duró la utopía.



13.2.25

Una de mis rosas

Una nube cenicienta
se posó sobre mi rosa,
y le ha quitado el color
que lucía tan hermosa.

Por unos ojitos azules
llenos de luz como el cielo
clavel de su corazón
y lirio de sus anhelos.

Tardará en salir el sol
que temple sus ilusiones
al perder en un instante
al amor de sus amores.

Dolorida está mi rosa
para ella no hay consuelo,
lánguidos tiene sus ojos
que también son azul cielo.




27.1.25

Dueto con Maquiavelo

 

Maquiavelo
Hay un verso que me ahoga 
que me quema la garganta 
un verso sin voz que canta 
si el alma se desahoga. 

Elda
En mi no encuentro el verso
ni me ahoga ni me quema
ni mi alma desahoga,
¿Será entonces por eso
que tanto se demora?

Maquiavelo
Este verso solo aboga 
una quietud placentera, 
la pluma es mi compañera, 
el papel mi amigo franco 
y la inspiración la arranco 
del centro de mi alma entera. 

Elda
Afortunado eres poeta,
acude con gracia tu musa
y la inspiración en ti se acusa
generosa y verdadera.

Maquiavelo
La musa jamás espera, 
ni se atrasa, ni se apura, 
porque la musa perdura 
cuando llega verdadera.

Elda
La mía nunca llega
ni falsa ni verdadera
y aunque la adorne de flores
o le cuente mis dolores,
se va, y corre que vuela.

Maquiavelo 
La pluma corre certera 
a lo largo de un papel, 
pobre del poeta aquel 
que no da paso a su musa 
o que la exprese confusa 
por los poros de su piel.

Elda
Le doy paso a la musa
de par en par abro puerta,
no se si no ve la entrada
o conmigo está confusa
o se finge medio muerta.

Maquiavelo afortunado
los versos en ti afloran
porque la musa te ama
y tus poemas florecen
en el fondo de tu alma.