Tengo ganas de quererte
aunque no te diga nada,
por estar mi voz quebrada
al tener vetado el verte.
Y aunque mi sentir es fuerte
de nada sirven mis ganas
que siento por las mañanas
y dilatan con las horas.
¡Me atormentan las demoras
de tus miradas lejanas!.
De tus miradas lejanas
no quiero ser horizonte,
prefiero ser polizonte
por unas cuantas semanas.
Hasta quitarme las lianas
del amor que me atormenta
con ese sabor a menta
de tu verbo tan divino,
que me elevó del camino
sin apenas darme cuenta.
Sin a penas darme cuenta
he volado sin razón
por seguir al corazón
me presente en esa venta.
Me hice pasar por sirvienta
al atisbar que era de él,
y dulce como la miel
caminé hacia aquel encuentro
contándole un falso cuento,
y descubrió mi papel.
-Mientes como una bellaca-
¡y me dijo que era vieja!
Me dejó medio perpleja
su decir sobre la Paca.
Es una linda polaca
por la que bebe los vientos,
y toca dos instrumentos
me dijo el muy insensato;
me pareció tan pazguato…
¡le mandé a freír pimientos!
Le mandé a freír pimientos
y alegre llegué a mi hogar,
no me interesaba amar
aquel hombre de mis cuentos.
Se equivocan sentimientos
si la vista no interviene,
te das cuenta que no tiene
lo que tiene que tener:
Un cuerpo de convencer
y que el bolsillo te llene.
Pobre hombre, las uvas están verdes dijo la zorra, dando la vuelta ;)
ResponderEliminarBesos.
¡Pobre hombre!, si estaba con la polaca, jajajaja.
EliminarMuchas gracias Alfred por tu lectura, siempre un placer.
Un abrazo.
Hola Elda.. Con respecto al inicio, te diré que no te cortes..jeje..
ResponderEliminarPero entrando en el argumento, es cierto, aveces el humo nos ciega los ojos, hasta que pasa la niebla y abrimos los parpados para darnos cuenta de la realidad..
Aparte te diré que me maravillas, utilizas expresiones con gran naturalidad que me fascinas..
No quiero ser horizonte, prefiero ser polizonte..
Ese sabor a menta de tu verbo..
Dulce como la miel..
Por la que beber los vientos..
Le mande a freír pimientos..
!GENIAL!.. Y todo ello con sencillez, sin sofisticaciones, genial.. Si tubiera tiempo, recopilaría tus poemas y me haría un libro..
Quien sabe igual lo vendo y me hago rico..jeje
Un abrazo amiga.. mis reverencias..
Yo es que soy muy sencilla, jajaja, aunque me gustaría escribir mejor, con un léxico apreciable, pero no sé, así de simple.
EliminarPues mira Llorenç, lo mismo si visitas esa imprenta de la que hablas en tu entrada, se podrían hacer una tirada de libros, sin editor, los vendías con esa capacidad lingüística que tienes, me hacías famosa... y te llevabas las ganancias, jajaja.
¡Anda que no es difícil vender poesía!
Muchas gracias por tu comentario amigo, siempre un gusto leerlos.
Un abrazo.
A veces nada es lo que parece. Besos.
ResponderEliminarGracias por tu visita Amapola.
EliminarUn beso.
En este relato versado, Elda,
ResponderEliminarnos dejas ese buen cuerpo
de esperar que no suceda
lo que predicen los versos,
aunque todo tiene su porque…
más la dicha que se pierde…
en el desencuentro,
tal vez se alcanza de otra manera…
puesto que en esta ocasión
no estaba de acontecer…
Un sonriente abrazo amiga
Bueno Dionisio, no es nada serio lo que aquí dejo, son bobadas que se me ocurren.
EliminarMuchas gracias por tu aporte siempre sabio.
Un abrazo.
No es oro todo lo que reluce Elda, me ha encantado este puntito de humor que le has puesto, una fábula poética, me ha gustado, mi felicitación Elda.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Y yo encantada Carmen, que le hayas encontrado ese puntito pues con esa intención lo hice, nada serio como le digo a Dionisio, aunque lleve su parte de verdad en lo que tú, como muy bien dices... no es oro todo lo que reluce.
EliminarMuchas gracias, siempre un honor la presencia de una poeta como tú.
Un abrazo hasta Murcia.
Décimas... Décimas de una mujer llena de vida que le canta a la vida, en verso, para, tal vez, ocultarse tras las rimas... Deseosa, y temerosa a la vez, de no ser bien comprendida.
ResponderEliminarY fluye el cauce del río, imperturbable a sus miradas... Mientras ella bajo el sauce suspira por la calidez de sus aguas.
Un abrazo, poeta.
PD: No hagas callar esa guitarra que clama por ti, enamorada, en cada cuerda y nota que baila.
Jajaja, ah yayay, deseosa y temerosa. Aquí nada de eso, pero lo que yo decía... un romántico escondido encuentro yo, y no creo equivocarme.
EliminarEncantador tu comentario Ernesto. Muchas gracias.
Un abrazo
Hola, Elda...
ResponderEliminarSoy portuguesa, vivo en Lisboa y tengo lido tus comentários en alguns blogs. Curiosa, vim mirar tu blog y estive lendo alguns de tus escritos, k mucho me agradaram.
Neste post, Decimas Jocosas, k entendi, satisfatoriamente, te digo k tienes una manera muy especial de relatar y encadear, de ligar um verso ao outro. Tienes mucha imaginação y escreves, fluentemente. Pois, nem todo o k parece es.
Besos y un cordial abrazo.
Hola CÉU, estoy encantadísima de tu paso por mi blog, y que hayas mirado y leído por algunos escritos.
EliminarImaginación mucha empleo en ellos, y me agrada mucho que así te lo parezca.
Muchas gracias por tu visita, te corresponderé en cuanto pueda.
Un abrazo.
Querida Elda, achei muito engraçado esta fábula em forma de poema, acho que entendi que nem tudo que reluz é ouro ...
ResponderEliminarbeijinhos, Léah
Hola Léah, me gusta mucho que te haya divertido, con esa idea lo hice, y cierto es que no es oro todo lo que reluce.
EliminarMuchas gracias por tu lectura amiga.
Un besito.
Hola Elda;he estado unos días ausente, y al volver he visto un cariñoso comentario tuyo.Te agradezco tu amabilidad, y al devolverte la visita me he encontrado con este poema tan gracioso.Haces bien en mandarle a freír espárragos,tanto a él como a su Paca la romana.
ResponderEliminarEstaré de vacaciones hasta el mes de septiembre.
Que pases un feliz verano.
Un beso
Jajaja, muchas gracias Carmen, me encanta que te haya parecido gracioso.
EliminarYo también estuve unos días fuera, y me marcharé pronto para todo el verano.
Que lo disfrutes.
Un beso.
¡¡A freir pimientos se ha dicho!!
ResponderEliminarAsí se habla. Ese pajarón que se vaya con la polaca y tu te quedas con .... bueno no sé, con quién se te antoje.
Un abrazo. Muy buena y divertidas décimas.
mariarosa
Jajaja, si yo me quedo en mi casa tranquilamente sin aguantar a nadie.
EliminarMuchas gracias Maria Rosa por tus palabras.
Un abrazo.
Te han quedado muy bien estas décimas, te salieron redonditas, te felicito.
ResponderEliminarEl pobre hombre del cuento se quedó con un palmo de narices.
Un abrazo.
Ahí voy fijándome de los que sabéis, pues yo a decir verdad no tenía ni idea.
EliminarMuchas gracias por tu visita y comentario Rafael.
Un abrazo.
Hola querida amiga: ¡Es maravilla esta poesía! Es juguetona, picaresca y fresca.
ResponderEliminarFelicidades, Un abrazo Eva
Hola Eva, así tan cual tu lo expresas es lo que quise trasmitir.
EliminarMe encantó tu paso y comentario... muchas gracias por ello.
Un abrazo.
Como de poesía no entiendo, no sé si las décimas llevan aparejado esta simpática y curiosa ligazón entre el final de la última estrofa y el principio de la siguiente.
ResponderEliminarSea como sea, me ha encantado. Y lo de que los sentimientos se equivocan si la vista no interviene es bien cierto, al igual que el refrán de "ojos que no ven, corazón que no siente".
Como siempre, es un gusto leer tus poemas con la agradable compañía de la música de fondo.
Un abrazo.
Pues sí Josep, creo que eso de ver a la persona es primordial...
EliminarYo tampoco sé si es correcto en décimas lo que he hecho, y sino fuera así, me lo he inventado, jajaja.
Muchas gracias por venir a leerme amigo, siempre un placer tu presencia.
Un abrazo.
Bien hecho.
ResponderEliminarGracias Claudio por tu lectura.
EliminarUN abrazo.
Graciosas décimas. Muchas veces se equivocan los sentimientos, sobre todo cuando no van acompañados de la razón.
ResponderEliminarSalud y ventura.
Sí, la razón es lo más importante, aunque de vez en cuando no hay que hacerle caso para divertirse un poco, jajaja.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu visita Antonio.
Un abrazo.
Acá decimos " a freir monos" ...bueno un decir no más...que culpa tendrán los monos! :))
ResponderEliminarPero de todo hay en este caminar y algo que no tienen son , ni sazón
que se vaya por donde vino y uno quedar en paz...