
Este viento está jugando
con palabras de mi boca,
que salen a borbotones
una detrás de otra.
Brotan silentes y dulces
pero el viento las trastoca,
desviándolas del camino
de mi boca hasta tu boca.
Un velo de nube negra
impedir quiere este juego,
y manda una lluvia fina
entre los rizos del viento.
Este viento está jugando
con palabras de mi boca,
que salen a borbotones
una detrás de otra.
Viento que barres caminos
levantando polvaredas
dile a mi amor hermoso
que el corazón tengo ansioso
por decirle cosas bellas.
Este viento está jugando
con palabras de mi boca,
que salen a borbotones
una detrás de otra.
Estoy cansada del juego,
mi sueño voy a olvidar
beberé mis palabras,
de ellas me voy a embriagar.
Pero entre juego y juego
dice el viento que me buscabas,
entre las briznas de polvo
y el aleteo de mis palabras.
Este viento está jugando
con palabras de mi boca,
que salen a borbotones
una detrás de otra.
¡Ay este viento que juega
con los sueños de mi alma!
Mientras juegue con nosotros, indica que aún estamos vivos y queremos seguir viviendo...lo malo sería que dejara de bramar.
ResponderEliminarMuy bello.
Un saludo.
Gracias, muy amable Fibo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Escribes mejor cuando lo haces más libre y menos rimbombante ("ha" embriagar va sin hache).
ResponderEliminarGracias Elisa, lo embriagar se me ha colado, y gracias también por tu opinión.
ResponderEliminarUn abrazo.
Elda, es un poema lleno de musicalidad y dulzura, el estribillo le da un toque encantador, me gusta mucho.
ResponderEliminar¡Un abrazo amiga!
Gracias cielito, un placer tu comentario.
ResponderEliminarBesitos.