Caminando por la vida
con aromas y perfumes
como en floridos jardines
los colores se confunden.
Como río en la tormenta
como ola brava en la mar
como loca primavera
que entra, perfuma y se va.
Como el verano caliente
con sus noches de agua tibia
que bañan tantos amores
cuando el día se termina.
Como el otoño silente
con sus tonos amarillos
va desprendiendo sus hojas
va desnudando los tilos.
Hasta que el invierno viene,
con largas y frías noches
silbando a las avecillas
que emigran donde hay calores.
Así se pasa la vida
como las cuatro estaciones,
el comienzo floreciendo
y el final perdiendo flores.
Tu poema va diciendo en sus versos una verdad, todo pasa y luego vuelve a renacer.
ResponderEliminarMientras escribo, escucho un tango que suena en tu blog y que se llama "Vuelvo al sur" en sas letras esta la clave, volvemos, como se vuelve siempre al amor.
Bello poema.
mariarosa
Hola Maria Rosa. No sabía el título del tango, cuando lo elegí solamente ponía, tango sensual.
EliminarMuchas gracias por tu lectura y comentario.
Un abrazo.
Que bellamente has expresado las etapas de la vida y la natraleza
ResponderEliminarSaber sacar de cada etapa lo mejor es sabiduria
Hasta en inveirno se vivien momentos hermosos
Cariños y buena semana
Totalmente de acuerdo contigo, en el invierno también hay cosas buenas en su analogía.
EliminarUn placer tu visita abu, y muchas gracias por dejar tus palabras.
Un abrazo.
Las cuatro estaciones van cumpliendo su ciclo, giran como una rueda... al igual que la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es Rafael, la similitud es palpable.
EliminarTe agradezco mucho que vengas a leerme.
Un abrazo.
Que bonito, sobre todo la parte final me encanta, y que verdad es. "Así se pasa la vida como las cuatro estaciones, el comienzo floreciendo y el final perdiendo flores, fantástico.
ResponderEliminarBesos Elda.
Encantada estoy Rafa de que te haya gustado.
EliminarSomos como las flores en sus diferentes etapas.
Un gusto encontrarte entre mis letrillas.
Un abrazo.
Qué bello canto a la vida que transcurre con sus cambios de estación. Así es, efectivamente, nuestro discurrir en este mundo; cada estación es una etapa, solo que en la vida real no podemos volverlas a repetir.
ResponderEliminarEste poema podría cantarse, acompañado de una guitarra, como lo haría un trovador.
Un abrazo lleno de flores.
Que cierto lo que dices. Nosotros no podemos volver a repetirlas...como el ciclo de las estaciones donde todo renace.
EliminarGracias Josep por tus encantadoras palabras.
Un abrazo.
Hola Elda, un bello canto para ensalzar las cuatro estaciones. Las fotos son preciosas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Conchi por tu visita y comentario.
EliminarUn placer que vengas a leerme.
Un abrazo.
Como el río, como la ola, como alborada que llega, como el declinar del ocaso, como día que se va.Como el otoño que bien describes de vívidos colores, como cuando los pétalos se caen, nos dejas nostalgias de románticos colores de tus versos. Derramas talento, resaltan genio, y nos acaricias con tu ingenio de poeta
ResponderEliminar¡Genial!
Besos
André
Uy poeta qué bonito comentario!!
EliminarMuchas gracias André por el regalo de tus palabras, ha sido un verdadero placer leerlas.
Un cálido abrazo.
Hola Elda.. Pero eres como la naturaleza, floreces creces, pero eres de hoja perenne, no se cae la hoja, en todo caso se viste de ocre, pero vuelve a tener color cada vez que escribes. Eres primavera continua, no importa el color de tus hojas, siempre son bellas, sean del color que sean...
ResponderEliminarUn abrazo..
Que más quisiera ser de hoja perenne como el tilo (creo). Pero mi hoja más que ocre, ya está adquiriendo un color marroncillo, jajaja.
EliminarAh qué bonito lo que dices amigo Llorenç, como me sube la autoestima. Me llevo tu comentario debajo del brazo toda emocionada, jeje.
Muchas gracias, siempre es un gusto tu visita.
Un abrazote.
No tenemos más remedio que caminar por las cuatro estaciones, las cuatro son necesarias y todas tienen su encanto, aunque nos guste más la primavera como en mi caso.
ResponderEliminarEl final del poema me ha gustado de forma especial, aunque me quedo con la hermosura de todo el poema.
Mi felicitación querida Elda.
Un abrazo de buena noche.
Pues sí, caminar todas las estaciones de la vida hasta la última, pero a mi no me importaría dar la vuelta otra vez, como la naturaleza, jeje.
EliminarMuchas gracias Carmen por tus hermosas palabras.
Un abrazo guapa.
Que ciertas son tus letras y el mensaje que nos deja.
ResponderEliminarMaravilloso y alegre es llegar llenando de felicidad todo en derredor, pero la marcha...
La marcha no es igual, cominamos hasta llegar a ese frío invierno, despedida y caída final.
Una buena semana y un abrazo.
Ambar
Mejor no pensar en el invierno Ambar, aunque a mi ya me está haciendo pequeñas caricias, jajaja.
EliminarMuchas gracias por tu lectura.
Un abrazo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarOlá Elda,
ResponderEliminarVemos passar frente a nós as quatro estações de seu poema, que emita a vida, com o seu tempo a mudar, com suas oferendas para que as colhamos e com as mudanças das estações, como você diz no seu poema, vamos perdendo as flores. Belo e sábio poema.
Abraços.
Pedro.
Así es Pedro, así pasa la vida mismamente.
EliminarMuchas gracias por venir a leerme.
Un abrazo.
Jugando con tus palabras, floreciendo y perdiendo flores, creo que el sentido es algo diferente. Se florece, sí, en la primavera de la vida. Pero más que perder al final lo que queda es el fruto, eso sí, tras "perder" su cascarilla, su espiga, su soporte...
ResponderEliminarUn abrazo, Elda.
Hola Ernesto!.
EliminarYa sé el sentido que tu le das que es muy bonito, pero el mío al escribirlo es simplemente el que parece… una comparación entre las estaciones del año y la vida del hombre en la tierra… siguiendo las mismas etapas, hasta el invierno donde se marchitan las flores como se marchita el cuerpo; o se pierde la "cascarilla"
Un placer tu lectura que te agradezco cálidamente.
Un abrazo
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarHola Elda, por fin un tiempito para visitar tu sitio.
ResponderEliminarLeerte es sencillamente buenísimo, siempre me dejas pensando.
Gracias pro comentario en mi última entrada, deseos de una buena semana.
Te dejo un beso.
Hola Char, que gusto tu presencia por aquí!!.
EliminarMe alegró mucho de tu visita y comentario, y te doy las gracias por ello.
Un abrazo.
Una descripción del paso de la vida bonita, con arte y además diferente, y aunque al final se pierdan las flores nunca hay que perder la sonrisa. Me ha encantado Elda.
ResponderEliminarEsos eso, nunca hay que perder la sonrisa, ella te ensancha el corazón por muy marchito que esté.
EliminarMuchas gracias Pepe ha sido muy placentero verte de nuevo entre mis letrillas.
Un abrazo.
Bello decir en tus letras. Siempre alguna flor quedara flotando su color y perfume en el viento.
ResponderEliminarAbrazo
Muchas María del Rosario por tu presencia y lectura.
EliminarUn gusto tu visita.
Un abrazo.
Un caminar se vislumbra ,como es el caminar d ela vida
ResponderEliminarsembramos, cosechamos...
volvemos a renacer...
la vida en su eterno trajín
en el ciclo que nos es vital y en ello dejamos huellas...
Tu poema es una fiesta magnifica, llena de luces, de colores, de naturaleza, de amor y paz, me encanto.
ResponderEliminarAbrazo