¡Ah, mi hombre desconocido!
ya no me sirves,
ya no me sirves de inspiración,
¡exprimido te he, tanto!
que has quedado cual cáscara de limón.
En ti tenía todos mis pensamientos
aún habiendo un muro entre los dos,
me imaginaba fantasías y cuentos,
pero…
ya no hay jugo ni esencia…
mis sentimientos se han vuelto flojos,
mi boca ya no suspira alientos cálidos por ti,
y no vuelan mariposas alrededor de mis ojos.
Los pliegues de mi blusa no laten,
de tu persona desconocida no tengo antojos.
El lugar donde caminaba la imaginación,
se borró del mapa y quedé libre,
libre de ilusión, pues te siento lejos,
muy lejos,
y exprimido,
apagándote como un eco
en esta razón que no me abandona.
¡Ah, mi hombre desconocido!
volveré a quererte cuando derribes el muro
y tu caminar me busque entre los telares del tiempo,
donde se tejen las pasiones,
donde se besan los silencios,
y entonces:
sobre ti... seguiré inspirándome,
Tu hombre desconocido volverá para tener pasiones en ti para seguir inspirándote.
ResponderEliminarUn beso muy dulce de seda, preciosa.
...y yo me pregunto, ¿ es posible que ese brasero vuelva a prender...?, ¿que nuevas llamaradas aviven la oscuridad...?
ResponderEliminarUn abrazo de tu nueva seguidora
Fina
Hay días en que las ausencias parecen definitivas, y la imaginación niega las palabras con las que escribir versos de amor; pero, de pronto, un día se vuelve a sentir el palpitar: es el hombre desconocido que regresa.
ResponderEliminarComo siempre, leo con agrado tu poema y me llega el sentimiento que pones al escribir.
Un abrazo.
Inquieto reflejo Elda, el que se percibe en tus versos en condicional…”volveré a quererte cuando derribes el muro”, y , si el impulso ávido del encuentro emerge…
ResponderEliminarUn abrazo
Volverá, seguro, ávido de tu inspiración, a tejer pasiones...
ResponderEliminarUn abrazo
Espero que ese hombre desconocido vuelva a aparecer, dando la cara y el corazón para que el tuyo vuelva a latir con fuerza.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Pobre del anónimo afortunado!
ResponderEliminartanto le usaste y sin medida
no le diste la respiración debida
el pobre ha quedado deshidratado
Bien le vienen unas vacaciones
para que vuelva renovado
lleno de nuevas sensaciones
estará contigo, renovado
¡Magnifico Elda! un enorme abrazo
Según iba leyendo, pensaba en las mariposas. Bueno, por mejor decir... si el jugo se ha exprimido, y el muro de la indiferencia se ha instalado de por medio, a otra cosa mariposa. Eso es lo que pensaba. Pero al final me he dado cuenta, que ese muro es simple arena y con un soplido caerá.
ResponderEliminarSalu2.
Hola Elda, No derribes el muro, no permitas que el hombre desconocido, te conozca... sigue idealizándolo, la belleza de lo desconocido, la pasión de lo inalcanzable, eso, eso mismo es lo que hace sublime al hombre desconocido, no tientes, lo que haya de ser, sera... sigue inspirada porque el hombre desconocido, es tu inspiración...
ResponderEliminarElda, tu sabes lo que te aprecio, pero estoy preocupado por el gato... me he quedado sin juguete, los buenos ratos que pasaba, rascandole la barriguita, mientras leía tus poemas.. era como si estuviera en el sofá de mi casa, oyendo como poemabas...
Un abrazo Elda....
Sabes que tienes el nombre de un pueblo de Alicante, yo he pasado allí muchas noches...Adeuuu
Tú, hacedora de paisajes en forma de letras, no necesitas de un limón exprimido para que tus palabras emanen perfume, ni la presencia de un hombre desconocido para que tu alma se inspire. Tú eres el sol (nunca lo olvides) y como él, no dejas de brillar aunque la tierra gire y le dé la espalda.
ResponderEliminarEsos desconocidos aparecen cuando menos lo esperas.
ResponderEliminarUn abrazo Elda.
Los telares del tiempo, aquellos que tejen las ilusiones y también los silencios.
ResponderEliminarBellísimas letras.
Abrazos mil.
Muchas gracias a todos por vuestros encantadores comentarios, y perdón por no responder a cada cual, pero estoy procurando escribir lo menos posible por una tendinitis que tengo en la mano derecha bastante rebelde.
ResponderEliminarAbrazos para todos y cada uno de vosotros.
Elda cuidate, que necesitamos que continúes escribiendo, a ese hombre desconocido o al otoño o a cualquier situación ya que tu consigues hacerla imborrable.
ResponderEliminarBesos
Puri
Ay Puri, que maja. Muchas gracias por tus palabras.
EliminarUn besito.
1º Reonte bien de tu tendinitis, y 2º Olvida el limón exprimido y ves por el campo a buscar uno de bien hermoso, que te haga volver a soñar, con su rico zumo.
ResponderEliminarBss.
Al leer lo del limón pensé que ibas a dar un remedio para la tendinitis, jajaja.
EliminarMuchas gracias Alfred por venir a leerme.
Un abrazo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Eliminarel hombre desconocido
ResponderEliminarque albergas en tus sueños
de manos grandes y ancho corazon
el que lame
tus veladas
y te acaricia desde lo lejos
el hombre que esperamos
como una redencion
Jajaja, que bonito Recomenzar, pero todo es imaginario.
EliminarMuchas gracias por venir a leerme, siempre un placer encontrarte.
Un abrazo.
Querida Elda que seu homem desconhecido se torne um livro aberto para você para que seus sonhos se tornem reais e doces como mel e não ácidos como o suco do limão.
ResponderEliminarComo sempre linda poesia.
beijinhos, Léah
Muchas gracias Leah, Sí, a ver si ese hombre desconocido me presta un libro lleno de letras en la imaginación y pueda seguir exprimiéndole, jajaja.
ResponderEliminarUn beso Leah.
Pero qué preciosidad de versos Elda, el cariño y el sentimiento que hay en ellos enamora. Precioso. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
ResponderEliminarMuy agradecida Pepe por tu bonito comentario.
ResponderEliminarHa sido un verdadero placer tu presencia.
Un abrazo.