La suave brisa del silencio
me bloquea los sentidos.
No pienso, solo miro
el paisaje de la estación que me cubre
rozadora de sensaciones,
momentos de quietud que gritan
en el mutismo ensordecedor
hiriendo mis oídos.
Palabras quiero alrededor,
bálsamo de la soledad
en los momentos que no la deseo…
Nómada del viento soy a veces
sobre alas deshabitadas
que aletean buscando tus latidos,
pero solo encuentro el desierto de tus huellas
donde la aridez reseca el tacto del olvido.
Grietas dolientes en los poros
me llevan de vuelta a la realidad,
y allí encuentro la suave brisa de lo conocido,
donde de vez en cuando
salen flores que aroman mi camino,
y doy gracias por el perfume que ello me produce
en el sentimiento de mis dominios.
Susurra el tic tac del reloj
y vuelve la noche a dormir,
y yo, a soñar
con tus labios en los míos.
en el sentimiento de mis dominios.
Susurra el tic tac del reloj
y vuelve la noche a dormir,
y yo, a soñar
con tus labios en los míos.
No, ya se ve que no dejas de soñar!
ResponderEliminarY a la vez la inspiración poética no solo no decae, razones para ello no hay, sino que, una vez más, se encumbra.
Abrazos Elda.
Buena forma de quedarse soñando.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un bello poema de sueños placenteros. Soñar, es libre y no cuesta dinero, los sueños siendo dulces el despertar a veces no queremos.
ResponderEliminarUn abrazo Elda.
La imagen de la entrada es impactante. Seguro que algún conductor para a recoger a la muchacha; si me pongo yo se me llevan por delante seguro ja, ja, ja. Que bueno eso de soñar con los labios de la persona amada. O incluso soñar con el amor.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Elda.
Soñar al arrullo la brisa, suena genial, Elda.
ResponderEliminarUn abrazo.
...Nómada del viento soy a veces
ResponderEliminarsobre alas deshabitadas
que aletean buscando tus latidos...
Que versos hermosos Elda, todo el poema es precioso, tan sutil y a la vez tan profundo.
Mis felicitaciones y un fuerte abrazo.
Profundo y precioso poema.
ResponderEliminarSiempre gratificante disfrutar de tus versos.
Un beso, Elda.
Hola Elda.. Siempre habra una suave brisa que despierta los sentidos y nos alienta los sueños.. Precioso poema.. La posibilidad de realizar un sueño es lo que hace que la vida sea interesante.
ResponderEliminarUn abrazo...
Ay Elda que bonito poema. Tus sentidos están alertas en el recuerdo y en la espera y ellos te motivan a escribir tan bello poema. Me encantó.
ResponderEliminarmariarosa
Olá, Elda!
ResponderEliminarGostei muito deste seu poema, “La suave brisa...”,
que se inicia com estes belíssimos versos:
“La suave brisa del silencio
me bloquea los sentidos.
No pienso, solo miro
el paisaje de la estación que me cubre
rozadora de sensaciones,
momentos de quietud que gritan
en el mutismo ensordecedor
hiriendo mis oídos.”
Parabéns, querida amiga Elda!
Uma ótima quinta-feira.
Beijo.
Pedro
Nunca dejes de soñar, Elda. Yo no podré saberlo ni, por lo tanto, avisarte. Pero quiero creer que sí sueñas, y mucho, a través de estas hermosas estrofas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Querida poeta.
ResponderEliminarEscreveste um poema impressionante de profunda saudade e solitude.
Como fundo, um amor dedicado, eterno, para sempre ausente e presente...
Apreciei as tuas belas metáforas, analogias, antíteses...
Grata pela emocionante leitura, ao som da guitarra de Amik.
Dias confortáveis em paz, harmonia.
Abrazo y besito
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Hola Elda, nos sorprendes hoy con esa sensación consciente, que te da pie para ir cabalgando por esas líneas no escritas en las que ir sedimentando lo que oníricamente se hace presente…muy bonito.
ResponderEliminarUn abrazo
Maravillosa tu poética inspiración.
ResponderEliminarMágicos despertares después de tan sentidos sueños.
Un cálido abrazo Elda
Del recuerdo y los anhelos que llenan el.alma desesperada por estar con.quien anhela en.su.ensueño realidad.
ResponderEliminarAbrazos.
¡Hola Elda!
ResponderEliminar¡Querida amiga, has construido un bellísimo y profundo poema que da para reflexionar sobre la soledad, entre otras bellas metáforas que vas dejando sueltas! A veces nos pasa eso, la mirada se pierde, vaga sin rumbo sin que la mente la guíe. Es muy cierto que una dulce palabra cuando uno se siente solo es como un antídoto que sana el alma. Me encanta todo el poema, va cambiando tu ánimo y el amor que crece en tu corazón que vuelve a ese camino donde brotan flores a tu paso con un final que es precioso.
Ha sido un placer pasar a leerte, que paso siempre, aunque no comente. Gracias poeta, por darnos tanto y tan bello, reina.
Te dejo mi inmensa gratitud y mi gran estima.
Un abrazo y se muy, muy feliz.
Ay que hermosos versos! me encantaron
ResponderEliminarMe encantas
ResponderEliminartu romance con las letras
la guitarra con las notas
y tu frescura de mujer entera
mil abrazos
Una inspiración única y maravillosa.
ResponderEliminarAbrazo
Muchas gracias a todos por vuestro tiempo, y por dejar la cálida huella de tan amables palabras.
ResponderEliminarAbrazos para todos y cada uno.
Soledad, a veces tan deseada y otras tan odiada, al igual que el silencio, a veces acompaña, tras estorba cual peor grito u alarido.
ResponderEliminarBesos.
Passei e voltei a ler...
ResponderEliminarEncantei-me de novo.
Dias bons, poeta.
Abraço caloroso.
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Gracias Amapola y Majo por vuestras lecturas.
ResponderEliminarSiempre un placer. Un abrazo.
Es este poema de una dulzura muy difícil de describir con palabras. Requiere dejar que afloren todas las sensaciones derivadas del amor.
ResponderEliminarUn abrazo.