¿quién eres tú? me pregunto,
¿quién eres?,
no te conozco.
¿Eres el viento silente
que roza mi rostro,
o eres el río que pasa
mojando mi cuerpo sombrío?.
O quizás seas aquel otoño
temprano,
que sembró de hojas secas
el jardín de mi barrio.
Rumbo fijo, rumbo incierto,
¿quién sabe?…
llora el viento
mientras vuela un ave.
Mar serena, mar bravía,
¿quién sabe?…
lo saben las olas
cuando arrecia el aire.
Arde la candela
se apaga el fuego,
¿quién sabe?…
lo sabe un corazón
que solitario va por la calle.
Triste, alegre, confundido
por un amor que no cabe,
por ser pequeño,
por ser grande,
¿quién sabe?…
lo sabe el desconocido
de aquella tarde.
Porque él era el viento,
el río, el otoño, el mar,
era el fuego,
y alrededor de él
se rizaban los sueños
fundiendo
las realidades.
Pero, ¿quién eres?…
no te conozco,
porque tu figura
se vela entre los encajes
de la niebla de mis ojos
No lo conoces, pero esta ahí, en tu corazón.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Rafael, un placer tu visita.
EliminarAbrazo.
Momentos que fueron mágicos y que quedaron en la memoria aunque con el tiempo no conozcamos a quien lo compartió con nosotros. El tiempo se lo lleva todo y solo nos deja retazos de pequeñas alegrías.
ResponderEliminarUn abrazo Elda.
Gracias Jero por tus amables visitas, y al verte por aquí me imagino que hago alguna cosilla un poco regular.
EliminarUn abrazo amigo.
almendrado, el gusto que deja este poema
ResponderEliminarese raro dulce amargor que se siente alma adentro
saludos
Bonito comentario que me da alas para seguir.
EliminarMuchas gracias por ello Omar.
Un abrazo.
Tanto tiempo sin leerte mujer.
ResponderEliminarHermoso, curioso, único, justo para encontrar imágenes de un sueño.
Que sea quien tú imaginas, si eso te hace volar de amor...
Besos muchos, dulces sueños.
Char me encanta verte entre mis letrillas. Espero que las tuyas vuelvan a estar más a menudo en tu blog como antes.
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Abrazos.
Yo soy... Mendiño y he pasado a saludarte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Juan.
Gracias Juan por tu visita, ha sido una sorpresa verte por aquí.
EliminarUn beso.
Me ha gustado mucho tu poema, me quedo con estos versos:
ResponderEliminar¿quién sabe?…
lo saben las olas
cuando arrecia el aire.
Arde la candela
se apaga el fuego,
¿quién sabe?…
un abrazo
fus
Muchas gracias fus, por tu visita y comentario que me ha encantado leer.
EliminarUn abrazo.
¿Quién sabe?... el otoño temprano que siembra de hojas seca tu jardín.
ResponderEliminarPrecioso!! poema.
Muchos abrazos y que tengas una grata semana.
Aunque un poco tarde, te agradezco mucho tu comentario Rayén. Ha sido muy placentero.
ResponderEliminarBesos.
Ah, el grato enigma por descubrir quien es el otro. Quizás mientras más esperamos saberlo sea la mejor forma de conocerlo, todo está ahi dentro, si así no fuera no saldrían los versos. Y si los versos salen es porque ya sabés quien es.
ResponderEliminarSon solo palabras las mias, lo que importa es tu poema, es grato recorrer tu sitio, volveré.
Gracias Navegante por tan bonitas palabras que dejas con tu comentario.
ResponderEliminarUn abrazo